«EL PUTO AMO»

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La expresión en cuestión, podría resultar grosera o chabacana, en muchos sentidos, pero mi intención no es agredir u ofender a nadie, realmente, sino afear los comportamientos abusivos en el poder de las naciones supuestamente demócratas.

He oído que, determinado presidente, de cuyo nombre prefiero no acordarme, es «el puto amo». Se pueden imaginar que, esta identificación que se hace de un presidente, contiene reminiscencias de abuso de poder, porque «el puto amo», es el que manda y ordena en un lugar, o en una nación, sin que nadie le haga sombra, ni consiga pararle lo más mínimo los pies. En otras palabras: «el puto amo», es quien pasa por encima de todos, arrollando, y sin consideración alguna de nada.

Lo peor, no obstante, deja de ser esto, cuando «el puto amo» resulta que lidera una nación, a la que se considera completamente demócrata. Nos estamos refiriendo, de tal manera, a que en la democracia donde Gobierna la anarquía, el autoritarismo, y la más terrible impunidad, no es, o deja de ser, automáticamente, una democracia, para convertise todo el entramado legal demócrata, en una tapadera de la corrupción, donde impera la impunidad de manera preocupante.

El puto amo, fue el General Franco, o fueron Hitler y Mussolini, entre otros muchos ejemplos, pero eran los putos amos porque la ley se lo permitía. En cualquier democracia normal, no deberían existir los putos amos, ni en la Aministración, ni en cualquier otro ámbito del poder, porque hacer lo que te sale de los cataplines, con la vida de la gente, es un crimen. Y no cualquier crimen, sino un crimen de Estado.

El puto amo, podría ser, también, el capo de una organización mafiosa, tratando el término alrededor del poder. Y una organización mafiosa, se asemeja una barbaridad, a un Estado donde manda un «puto amo», cuando dicho Estado es definido por la letra de la ley, como democracia y Estado de Derecho.

FRAN AUDIJE

Madrid,España,24 de agosto del 2023

Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.


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