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Es indudable a estas alturas, la pretensión de este personaje siniestro, que ha llegado a la presidencia del Gobierno español, sin ganar una sola cuestación popular, y con el apoyo de una serie de partidos políticos, que, todos unidos, logran una fuerza considerable, pero que uno a uno, son todos minoritarios en el contexto de la representación ciudadana, y a los cuales les caracteriza el odio hacia España, o una idea de nación que no está clara del todo, pero que es, más bien, antidemocrática.
Pedro Sánchez Pérez-Castejón, está buscando perpetuarse en el poder ilegalmente, legalizando su perpetuación a través del derrumbamiento de la actual Constitución española de 1978, para dar paso a una pretendida República, que será establecida de manera unilateral por las fuerzas de la izquierda política, y que, debido a tal unilateralidad, constituirá el imperio de una ideología en el poder, lo que se define claramente por dictadura totalitaria.
España volvería, si esto no se para, a ser la Una, Grande, y Libre, de pretéritos momentos aciagos sin libertad, más, en la nueva ocasión que se presenta, dichos momentos tan infortunados, vendrán dictados por mentes comunistas, cercanos a la ideología de género, que excluirán la práctica libre de la religión, y que marginarán de forma violenta a todo aquel que trate de hacerles frente. Esto, y no otra cosa, es el totalitarismo: el dominio absoluto y sin contestación, de una ideología y de un proyecto político, tan particulares y concretos, como lo fue el franquista, tan criticado hipócritamente por Pedro Sánchez y los que le apoyan.
Estos señores que han llegado al poder en España, tratando de amordazar a los jueces, y haciendo toda clase de trampas y juegos sucios, con tal de pegarnos el cambiazo de régimen, estableciendo en España una auténtica dictadura comunista radical e intolerante, deben encontrar la oposición de una España mayoritaria, que no desea resignarse a la desfachatez de la corrupción, de la inmoralidad total, de la entrada de una corriente engañosa, que pretende liberar al hombre en la depravación sexual, y en una falta impresionante de respeto hacia el discrepante, y hacia los derechos humanos más elementales.
Debemos recordar, que España está actualmente en una crisis económica sin precedentes dentro de la paz, y que nos acerca a una economía de tiempos bélicos. Pedro Sánchez, se mantiene en el poder, y mantiene en el poder su proyecto totalitario, con la financiación de la Unión Europea, cuya excusa es el desarrollo económico de España, y las ayudas a la recuperación tras la grave crisis del COVID 19. Y debemos recordar que el Gobierno español no desea aclarar la gestión que está haciendo de buena parte de estos fondos, porque los está dedicando al desarrollo de este proyecto de corrupción y de violación de los derechos humanos.
Si, finalmente, la Unión Europea y los españoles de buena voluntad, claudican ante esta barbaridad que se avecina, la República que vendrá será un régimen de miseria y depravación, que dudo pueda mantenerse en pie por sí solo, y, con bastante probabilidad, se derrumbará sobre sus propios cimientos de putrefacción, para dar paso a un incierto futuro que no me atrevo ni a imaginar.
FRAN AUDIJE
Madrid,España,19 de noviembre del 2023
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