Güimar,Tenerife, 7 de marzo del 2024
Aqualia es una multinacional de capital español y australiano, que brinda servicios en relación al abastecimiento de agua a la población, autocalificando su gestión como sostenible y contemplativa de la ciudadanía más vulnerable, según la propia compañía asegura en su página web. D. Francisco Hernández Armas, concejal del Partido Popular de Güimar, miembro de la comisión de seguimiento a la empresa concesionaria del agua, nos atiende en la siguiente entrevista, que trata de aclarar la postura de la oposición en un tema que está suscitando tanta polémica.
¿Cómo explica el PP de Güimar este presunto error en el cobro de las facturas del agua, tan claramente lesivo para los intereses de los administrados?.
No ha sido un error, sino algo completamente deliberado, para subsanar errores que ellos habían tenido previos en otras facturaciones, según dicen, pero que es falso. Ellos tienen la obligación de facturar cada 60 días, pero no más de ese tiempo, porque si no se genera un agravio económico para los vecinos.
Aqualia, en la anterior etapa de concesión en Güimar, ya tuvo que devolver unos 60.000 Euros a los vecinos, porque se inventaron los tramos tarifarios, que, curiosamente, les beneficiaba a ellos.
Por tanto, no es la primera vez, y de error, nada.
¿Cómo es posible que el Ayuntamiento de Güimar, a través de su concejal del Ciclo Integral del Agua, Airam Puerta (PSOE), esté defendiendo tan a ultranza a la empresa concesionaria de abastecimiento del agua, en contra de los intereses de la ciudadanía?
Entrando en el terreno de las especulaciones, puede ser que haya algún interés económico en el asunto, no lo sabemos con certeza. Pero no es solo el señor Airam Puerta el que defiende tan apasionadamente a la empresa, también lo hace la secretaria del Ayuntamiento, lo cual nos hace dudar un poco de la integridad que debería haber en estas concesiones para exigirles a las empresas concesionarias, que cumplan con el pliego de condiciones a rajatabla. Son reacios a abrirles un expediente por los errores cometidos, y se defiende a la empresa de muchas maneras, mirando hacia otro lado, lo cual nos hace sospechar que existe algún interés oculto, que deberíamos investigar más a fondo.
En cuanto a la explotación del pozo de Cataño, que la propia inspección sanitaria de Salud Pública ha declarado como contaminado, parece obvio que se tendría que haber descartado como fuente de abastecimiento. Por otro lado, el hecho de que el Ayuntamiento Güimar haya cambiado de impresiones respecto a su decisión inicial de no continuar explotando este pozo, sigue constituyendo un enigma…
¿Cómo explica el PP de Güimar todas estas dudas?
Desde hace mucho tiempo, antes del informe de 2019, existe otro informe previo en el que se aconseja no usar este pozo, debido al exceso de flúor y al exceso de nitratos. En el 2019, Sanidad, a través del Ayuntamiento, corrobora ese primer informe, y en el 2023, vuelven a preguntarle por la calidad del pozo de Cataño, siendo idéntica la respuesta a la de los informes anteriores. Sanidad aconseja no utilizar esta agua de manera directa, sino tratada, y mezclada con otro tipo de agua, pero lo que ocurre es que empeoramos la calidad del agua potable que utilizamos como mezcla, por ello, en los pliegos de condiciones, tanto administrativos, como de condiciones técnicas, este pozo se excluía como fuente de abastecimiento de agua potable, y se daba un plazo de dos años para que se dejara de utilizar esta agua. Una vez transcurridos los dos años, vuelve a haber un intento por parte de Aqualia, para utilizar esta agua, cosa que nos sorprende, dadas las condiciones de los pliegos de condiciones, los cuales, sin embargo, tratan de beneficiar a la empresa económicamente en todas las modificaciones que se realizan. La última modificación, que esperamos no se produzca, es que se vuelva a utilizar el agua del pozo de Cataño.
¿Qué razones encuentra el PP de Güimar para esa propuesta de subida, nada menos que de un 19%, en las tarifas del abastecimiento del agua en su municipio?
Desde nuestro punto de vista no es asumible esta barbaridad de subida, teniendo en cuenta que hace 2 años tomaron la concesión, y se les subió un 5,3 % el precio del suministro del agua, además de otras medidas de beneficio a esta empresa, como que se puedan cobrar 10 metros cúbicos de agua, aunque no se lleguen a consumir, e incluso beneficios que no están contemplados en el pliego de condiciones.
Aqualia tiene un 30% de pérdidas en la gestión del suministro del agua, siendo en la mejora de esta gestión, donde la empresa debe buscar el beneficio económico, y no en una subida indiscriminada de los precios que paga el consumidor.
Por tanto, no encontramos justificada esta subida de un 19%, ni mucho menos.
¿Ha contemplado el PP de Güimar la posibilidad de abrir una investigación por un posible caso de corrupción, ya que los intereses de Aqualia y los del Gobierno tripartito de Güimar, parecen ir sospechosamente unidos, incluso manifiestamente en contra de los propios vecinos, como la portavoz del PP en el Pleno municipal, Carmen Luisa Castro, dejó de relieve?.
Vemos algunas cuestiones que podrían ser fraudulentas, pero que no podemos demostrar, a pesar de que siempre estamos vigilantes, pero en este terreno debemos andar con pies de plomo, y contar con una documentación que acredite que existe de verdad corrupción, y si alguien fuera más inteligente que nosotros, podría realizar una investigación, para presentar una denuncia en fiscalía, algo que se está barajando, y que la fiscalía tome cartas en el asunto.
¿Podría darnos algunos apuntes resumidos sobre la política que propone el PP de Güimar en materia de abastecimiento del agua, teniendo en cuenta la problemática que presenta este asunto en las islas Canarias?
El agua es un bien esencial, un derecho humano, que, por tanto, no debe convertirse en un negocio privado. Creemos que el abastecimiento del agua potable a una población, debería realizarse de forma directa por el Ayuntamiento, y no a través de una empresa privada, porque todos los problemas que estamos exponiendo ahora, nos vienen de este hecho de la concesión.
Necesitamos una mayor inversión, para, por ejemplo, evitar las pérdidas de agua que se producen en la canalización del agua que les llega a los consumidores, y en los depósitos del agua, construidos defectuosamente por Aqualia, sin que se les haya exigido responsabilidades.
Otro tipo de encarecimiento del precio del agua, se produce cuando se realiza cualquier obra de mejora, la cual es directamente repercutida al consumidor, y esto nos parece un abuso.
Todos estos inconvenientes que hemos tratado, creemos que, desde lo público, se podrían subsanar y evitar, realizando un abastecimiento del agua mucho más eficaz, evitando las pérdidas, y el encarecimiento del precio del agua.
REVISTA UNIDAD PARLAMENTARIA EUROPA.
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