Nelson Acosta Espinoza

Venezuela 11 de septiembre del 2025

«El que no es de izquierda a lo 20 años no tiene corazón, quien  sigue siéndolo a los 40 no tiene cerebro». Frase atribuida a Winston Churchill. Descartando cierta exageración, muy consona con su personalidad, la sentencia envuelve una certeza.

La juventud siempre es proclive a seguir causas idealistas. En pasadas décadas fué protagonista de movimientos contestarios de diversas naturaleza. Se involucraron activamente en la creación de formas alternativas de vida.

El mayo francés, la primavera de Praga, el movimiento hippie, el festival de música y arte de Woodstock y la lucha armada fueron algunos de los escenarios donde la juventud jugó un rol protagónico.

El caso contrario. Seguir siendo de izquierda después de los 40, lo ejemplifica quienes ejercen  la dirección política del país.

«Falta de cerebro». Responsable de la errada concepción que ha alimentary sus políticas de «izquierda»o socialistas por más señas.

Carlos Rangel (1928-1980) prestigioso intelectual y periodista venezolano advirtió, tempranamente, sobre las perversiones  del populismo en conjunción con prácticas clienterales y un exacerbado estatismo.

En su libro «Del buen salvaje al buen revolucionario» expuso con sencillez y claridad una interpretacion de la realidad cultural y política de nuestros países.

Distinta a las dominante en los círculos políticos de izquierda.
Visión que marcó distancia y desmontó  mitos elaborados  sobre la identidad latinoamericana.

Uno de los más arraigados era el «del buen salvaje». Que postula una visión del nativo como persona buena, pacífica y virtuosa corrompida por la  influencia de la cultura occidental.

Virtudes que el «buen revolucionario» las restituirá.

El tercermundismoEn este libro desmontó la falsa creencia que atribuye a factores externos la responsabilidad por nuestros males y atraso.

La causas que generan el subdesarrollo recaen primordialmente en factores internos y no en el supuesto intercambio desigual (centro/periferia ) con economías desarrolladas.

Advirtió que las rutas que conducen al disfrute de plena prosperidad son el cultivo de libertad, igualdad y soberanía.

Visión que está en la antípodas de las aupadas por intelectuales como Eduardo Galeano (1940-2015) Samir Amin, Emmanuel Arghiri  y André Gunder Frank.

En su libro «Las venas abiertas de América Latina» suscribió la peregrina  tesis que apuntaba como  causa del atraso la expoliación a que han sido sometidos nuestros países por potencias europeas y Estados Unidos.

Esta errada concepción se transformó en una suerte de «precepto bíblico» para movimientos de izquierda y venerada por socialistas en nuestro país.

Samir Amin (1931-2018) y Arghiri Emmanuel (1911-2001) elaboraron el concepto de  intercambio desigual con el cual intentaban dar cuenta del diferencial crecimiento existente entre países  desarrollados y subdesarrollados.

Gunder Frank (1929-2005), por su parte, sugirió que el subdesarrollo es una consecuencia directa de la explotación ejercida por naciones ricas (el centro) sobre las más pobres (la periferia).

A su juicio la forma de escapar de esta relación de dependencia era mediante la creación de una economía no capitalista como el socialismo.

Un muestra de la impronta de estas ideas la proporcionó el  Presidente Chávez.

A propósito de la Cumbre de las Américas del año 2009 obsequió a  Barack Obama el libro Las Venas Abiertas de América Latina de Eduardo Galeano.

Con este gesto  ratificó su visión simplona y equivocada  de nuestra historia.

Estamos a la puerta del inicio de un nuevo ciclo histórico.

Se espera  que nuevos protagonistas sean portadores de ideas diferentes a las que sustentaron las pasadas experiencias democráticas y el ensayo socialista.

Voy a parafrasear una sabia reflexión de Albert Einstein . «Es absurdo hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes».

Una nueva faena  se aproxima.

Habrá que «lidiar»
con capote y torero nuevo.

Sí, realmente, la intención es matar al «toro viejo».
Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores@UnidadParlamentariaEuropa