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Es el título de mi artículo de hoy, tomado de un verso del gran poeta español, Blas de Otero, con el que también titula una de sus mejores obras poéticas, y de las más patrióticas.
La temática literaria de Blas de Otero, es, esencialmente, España, como hijo de la Postguerra Civil de 1936-1939. Durante esta época, especialmente, no es de extrañar que se puedan encontrar poetas, que se dediquen a la problemática de España, que, en los dos últimos siglos, es una problemática de convivencia entre todos los españoles, y de subsistencia como nación.
Pero, nuestro poeta, en contra de muchas otras voces quejumbrosas y lapidarias, contra la patria, se expresa en modo conciliador y optimista, siempre a favor del futuro, pero sin dejar de reconocer las dificultades y los males de nuestra España.
Blas de Otero, es capaz de alcanzar altas cimas artísticas, expresando su amor por España, en la admiración de sus grandes virtudes, y en la esperanza de que nuestras miserias se van a acabar relativizando, para, por fin, ser capaces de abrazarnos entre todos, también con nuestras diferencias, de manera que será posible que España arranque y despegue, hacia la grandeza de la unidad en la hermandad y en el perdón.
Yo mismo, también como poeta y aprendiz del maestro, Blas de Otero, me quiero unir a este carisma constructor y positivo, a pesar de todas las dificultades con las que nos estamos encontrando, motivadas por las diferentes crisis que nos asolan, y por la escasa responsabilidad de algunos de nosotros.
Creo, firmemente, que España cuenta con gente de mucha valía, en todos los campos y a todos los niveles. He tenido la oportunidad de conocer a personas de todo signo, con una gran buena fe, y muchas ganas de hacer las cosas bien, para beneficio de todos, y no solo de unos pocos. Gente anónima, que trabaja con abnegación y sacrificio de sol a sol, haciendo todo lo posible por sacar adelante esto, que es España, cada uno desde su humilde parcela, pero sin dejar de aportar su granito de arena.
Junto a Blas de Otero, tengo que decir que España no estará perdida, contando con este valiosísimo capital humano, de buena gente y de gente con sentido común, que quieren trabajar con sacrificio y honradez, por un futuro común, en el derecho, en la paz, en el amor, en el respeto, en el ir siempre más allá, para hacer de este paraíso geográfico, un paraíso de convivencia y de prosperidad, donde podamos vivir todos, y no solo unos pocos a costa de los otros.
FRAN AUDIJE
Madrid,España,8 de septiembre 2023
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