Cualquier acto que llevemos a cabo en esta vida, tiene siempre consecuencias. Más tarde o más temprano, acaba haciéndose notorio el efecto de nuestro comportamiento. Y no porque lo diga yo, sino porque es una ley básica de vida, que hasta tiene un nombre científico: «Ley de Causa-Efecto».
Los efectos o consecuencias de nuestros actos, van en la misma línea del cariz de lo que hacemos, de nuestro comportamiento. Solo hay que ser un pelín observador, para darse cuenta de que un comportamiento anormal, afecta a los demás, de manera que la reacción de las personas afectadas, es también anormal.
Dice San Agustín, y es verdad, que el hombre está hecho para la paz, que somos amantes de la paz. Yo diría que esto es así por regla general, porque siempre hay alguien que parece que no está a gusto como no sea incordiando al prójimo. Incordiar al prójimo es no saber respetar la paz de esa o de esas personas. Y, cuando no respeto la paz de otros, que, según la naturaleza humana, sería algo anormal, lo normal es que se responda de manera agresiva o violenta, es decir, de manera anormal, porque somos seres que preferimos la paz, como bien ha sabido analizar San Agustín.
Dicen que no hay paz sin justicia. Otra gran verdad. Cuando agredo, sin otra justificación que el capricho, a otra persona, violando su derecho humano a la paz, lo que estoy provocando es una contienda, en la que el agredido se va a intentar defender, y, en este caso, lo que surge, como efecto anormalmente normal, es una guerra.
Las guerras son siempre negativas y destructivas para todos, porque la guerra es la ausencia de la paz, que es el estado normal del ser humano, al que tendemos por nuestra propia naturaleza. Es decir, que la paz es de justicia y es lo justo, lo más normal en las personas. Aquellos que no saben respetar la paz, y que son promotores de la guerra, son gente injusta, y son gente anormal.
FRAN AUDIJE
Madrid,España,13 de noviembre del 2023 Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.
Descubre más desde REVISTA UNIDAD PARLAMENTARIA
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
UP es un esfuerzo editorial de todos, una visión del mundo que nos lleva a preguntarnos más que a afirmar. Es darle opción a diferentes voces que vienen de cualquier parte del mundo.
Nuestro propósito es mostrar una realidad que frente a nuestros ojos ocurre y no tiene trascendencia en los grandes medios, un parlamento ciudadano en el que se toman decisiones a partir de la constante visión de nuestros problemas, sin dejarse llevar por fanatismos o miradas extremas.
Ver todas las entradas de Unidad Parlamentaria