ESPERAR

Escucha el artículo.

Tiempo de lectura 3 minutos.

Bueno, si no queda más remedio, habrá que esperar… pero, esperemos teniendo en cuenta, que la vida esta se termina, que hay un límite vital, y que las fuerzas se van agotando, hasta que caigamos en el sepulcro, que es el fin inevitable de esta vida. Hagamos cuenta que, normalmente, antes de la muerte física, se da una época de decaimiento y de enfermedad, que se llama la vejez. Por tanto, no pensemos que el que vive hasta los 90 ó los 100 años, ha disfrutado de la vida mucho tiempo, ya que debemos descontar, al menos 40 años, en los que se vive el periodo de la vejez, el cual es un periodo para pocos trotes…

El que espera, desespera, se dice con frecuencia. Por eso, si estás esperando, cerciórate de que la causa lo merece, porque cada segundo de la vida que se consume, y se consume inexorablemente, nunca se vuelve a recuperar. Lo de recuperar el tiempo perdido, también me hace gracia, porque es mentira: el tiempo consumido, como cualquier cosa que se consume y se termina, jamás se vuelve a recuperar. Lo que hacemos es utilizar el tiempo que nos queda, para rehacer algo, o para vivir algo que no pudimos vivir. Y ese tiempo utilizado lo estamos quitando a otras experiencias, que nos negamos, para recuperar lo que no pudimos vivir.

Cuidado con los ladrones de tiempo, y, por consiguiente, con los ladrones de vida. Son esos que te ofrecen falsas expectativas, y que, incluso, para que te conformes, crean alrededor tuyo una ilusión insatisfactoria, que te ayuda a conformarte, de manera que congelan tu capacidad luchadora, y la posibilidad de que te rebeles. Cuando te des cuenta de que has estado perdiendo el tiempo, y malgastando tu vida, será demasiado tarde, y los ladrones estos habrán saqueado tu vida, y te dejarán en una triste desolación.

No digo yo que ser un héroe o ser un santo, sea algo malo o negativo, pero si decides hacer una gesta, que sea conscientemente, y nunca sin parar de luchar. Si esperas, espera dando yesca, y espera luchando para que tus deseos se hagan realidad. La espera confiando en que «Dios proveerá», es bastante falsa, y más una actitud de autoengaño para acomodarse sin remuerdo de conciencia. «A Dios rogando, y con el mazo dando», es la actitud correcta.

Que la muerte nos pille con las botas puestas, y con el sable en la mano, tras agotar todas las municiones del Winchester, hermanos.

FRAN AUDIJE

Madrid,España,5 de diciembre del 2023
Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores.


Descubre más desde REVISTA UNIDAD PARLAMENTARIA

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Deja un comentario