“Jaranchac”


MI AUTÓGRAFO IMPOSIBLE DE MARIO VARGAS LLOSA EN LA FERIA DEL LIBRO DE BOGOTÁ…

Por Ismagomezdantes

/ El día en que MVLl, casi fue linchado en la Biblioteca Nacional de Bogotá

* Para Sir Mario Vargas Llosa,


y para mi hermano Octavio,
desde Colombia

¿Lo querían linchar? Vargas Llosa, era el invitado de honor a la Feria de Libro de Bogotá (antes de ser Premio Nobel de Literatura), y en el auditorio de la Biblioteca Nacional de Bogotá no cabía un alfiler.
Su brillante alocución habrá durado hora y media, y el nivel hipnótico de la conferencia magistral resultaba inquietante en aquel espacio con olor a pergamino y papel, y en donde se sentía que algo estallaría…, ¡y estalló!
Nadie chistaba.
Y el dandy Vargas Llosa terminó con un aplauso unánime laaaargo, pero que fue inexplicablemente interrumpido por un coro de hooligans literarios, metafanáticos de GABO, y que al parecer, no le perdonaban al limeño, el puñetazo de celos de AMOR, que éste había proyectado al ojo tierno del autor de Cien Años de Soledad, una joya literaria escrita entre deudas con el carnicero y su casero (en la CDMX), y una paciente Mercedes, quien le dió el sí a Gabriel, a pesar de que su rígido padre (quien se oponía tajante a ese matrimonio…),  le había advertido: “Te va a dar de comer papel”, y atinó… ¡Como el mejor nigromante, o prestidigitador!
¡Santa cólera de estos colombianos impíos Batman! Y con fama de sacar cuchillo (“de una”), a la más mínima provocación…
Y las tres primeras filas corrieron contra el pasmado peruano quien sólo había hecho escribir ¡Y bien! Tanto que años después recibió el Nobel…), trinando y tronando coros agresivos, que obligaron a un espontáneo séquito de seguidores, a auparlo en sus hombros (cual un féretro), para lograr sacarlo entre gritos del aula magna…
¿CÓMO DIABLOS SE ME OCURRIÓ ACERCARME PARA PEDIRLE UN AUTOGRAFO EN EL DESORDENADO E HISTÉRICO TUMULTO? (TAN PARECIDO A UN SAN FERMÍN).
Resulta que quien esto escribe (fanático de las librerías de viejo), días antes había comprado una !PRIMERA EDICIÓN! de La Ciudad y los Perros que había podido rastrear en una vieja casa de La Candelaria, centro de Bogotá.
Y ese mismo libro lo tenía ahí MVLl (¡En sus narices!) El hoy difunto Premio Nobel, en hombros, me preguntó curioso: Pero ¿dónde consiguió usted esta joya? ¿A quién se la dedico?
A lo que contesté. A mi hermano Octavio. Y así lo hizo, todavía pasmado de ese libro viejo que narraba su adolescencia en el colegio de Lima, en donde ayer, los nuevos alumnos, le brindaron un homenaje, aunque él pidiera (con humildad para su funeral…):  discreción, y una celebración íntima y de amigos… ASI OCURRIÓ.
El libro firmado por un Premio Nobel (y que le regalé a mi hermano mayor…), lo tiene hoy Octavio en su fina biblioteca de Cuernavaca…
Ayer me escribió.

“Tengo 24 libros de MVLl. Todos leídos. Mi colección incluye una primera edición de La Ciudad y los Perros, autografiada, que tú me regalaste (una joya). Estoy en proceso de pedir (y leer) los libros que no tengo. A nadie seguí en mi vida con tanta devoción, con tanta admiración. Estoy de luto”.
Y estamos de luto. Está de luto el mundo…
QEPD el furibundo anticomunista, antifidelista, y antidictaduras maquilladas (de izquierda o de derecha), más persistente…
Aunque le haya pegado un puñetazo certero a su entrañable examigo (su otra piel literaria), Gabriel García Márquez. ¿Habrá hoy una tertulia en el más allá, y una reconciliación divina?
Déjanos que te extrañamos, limeño…

Hoy eres polvo, pero también eternidad…
Los artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de sus autores. @UnidadParlamentariaEuropa


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