AMARILLO MANGO

Por Isrrael Sotillo

Barinas, Venezuela, 4 de junio de 2025

Chuy Rumbos, en el pueblo de Libertad de Barinas, tiene siete matas de mango en el solar de su casa. Las mangíferas cargan unos frutos requetesabrosos, dulcísimos y bien jugosos, por eso los pájaros chiriguares, que son abundantes en Libertad de Barinas durante el mes de mayo, lo invaden todo, son tantos que hasta oscurecen el cielo con sus revoloteos incesantes para comerse la carnosa pulpa del fruto originario de la India, el néctar preferido de los dioses de la Trimurti. Jesús Rafael, el benjamín de Chuy Rumbos, de cabellos amarillitos, como el de los mangos, ahora que se acabó la cosecha, tiene que esconderse cuando los oye, cuando los ve venir, porque los chiriguares cada vez que avistan ‘el cerro prendío’ se le lanzan encima y lo picotean con furia en la cabeza.


Descubre más desde REVISTA UNIDAD PARLAMENTARIA

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Deja un comentario