Por Moy Zizumbo

Morelia, Michoacán, 26 de junio del 2023

– Buenos días Chicarcas ¿cómo andamos?

– Ando bien enmuinado Inge. ayer jugué con mi compadre Benito un pokarito de apuesta y no me pagó el hijo de tantas por………..

– Cálmate Chicarcas, acuérdate que abrazos y no balazos.

– Oiga Inge, hablando de ese tema ¿será que sí está funcionando?

– Claro que sí Chicarcas, los números son fríos, todo el mundo sabe que en el gobierno de Felipe Calderón se dispararon los homicidios de 60,452 a 127,213 al año, y me atrevo a asegurar que esa cifra está maquillada.

– Ah jijo la cosa sí se puso más fea de lo que uno se imaginaba.

– Así es, con Peña Nieto siguió subiendo esa cifra, insisto maquillada, y es hasta ahora que ha bajado de 156,000 a 126,896, cifras del Inegi.

– Inge yo supe del hijo de un amigo mío que fue reclutado por los mañosos y me dice que los instruyen en el manejo de armas y algo de defensa personal y la última prueba es salir a la calle apuntarle a cualquier persona y asesinarlo a sangre fría, si no lo hace el muchacho lo bajan del carro y le dicen que no sirve para eso.

– Así es Chicarcas, al crimen organizado le sobra la carne de cañón, pero ahora con los programas sociales de tu «cabecita de algodón» para jóvenes, la Guardia Nacional con sus más de 200 cuarteles, y una fuerza operativa de 128,233 personas la delincuencia ha bajado, pésele a quien le pese.

 Con esas acciones se sientan las bases para continuar bajando el número de homicidios en México. Ya le tocará el próximo presidente o presidenta no desviarse de la ruta trazada por Andrés Manuel López Obrador, ya que sería un grave error cambiar de estrategia.